Para empezar en el maravilloso mundo de la repostería nos será de mucha ayuda disponer de las mejores herramientas para ayudarnos en la elaboración de recetas y, los rodillos de repostería es uno de los más imprescindebles y uno de los mejores utensilios para hacer galletas.
Estos rodillos se usan de una forma tan sencilla que entendemos que cada vez los estén usando más personas. Nos permiten no solo beneficiarnos de las funciones principales del rodillo, sino que al mismo tiempo cuentan con el incentivo adicional de contar con un diseño que se marcará cuando lo pasemos por encima de la masa de galletas.
Lo podemos utilizar con diversas superficies, como la masa de galletas clásica, el mazapán o el fondant. Una vez lo utilicemos solo habrá que cortar la masa de forma adecuada y dispondremos de una horneada de galletas que sorprenderá a nuestros seres queridos por el diseño que les habremos dado. Los distintos modelos disponibles nos permiten dar un buen surtido de diseños a nuestros dulces. Por ejemplo, a nosotros nos encanta el rodillo marcador con imágenes de unicornios, ya que se trata de un estilo fantástico que encantará a los niños en cualquier época del año.
La fabricación de los rodillos para marcar recurre a la madera de los mejores árboles y las mayores calidades, como madera de haya. Eso garantiza que podréis usar el rodillo durante largos periodos de tiempo, aunque recomendamos que no lo lavéis en el lavavajillas, puesto que no están preparados para ello. Siempre hay que cuidar el rodillo y darle la atención que necesita a fin de que lo tengamos a punto cada vez que podamos llegar a necesitarlo.
Rodillos ajustables con medidas personalizadas
La evolución del rodillo clásico ha derivado a que, en la actualidad, los rodillos de repostería incorporen un sistema de aros que permiten nivelar la forma en la que vamos a realizar el amasado. Estos rodillos son la forma en la que nos aseguramos de conseguir un grosor idéntico en todas las galletas, de manera que cuando las saquemos del horno lucirán un aspecto absolutamente profesional.
Pero, como decimos, no solo nos dan el soporte para igualar la masa y que todas las galletas sean idénticas, sino que su gran capacidad es la personalización del grosor. La colocación de un aro u otro es lo que marca el grosor que le estaremos dando a las galletas.
Los aros se cambian con mucha facilidad y suelen incluirse en cada rodillo en unidades de las medidas más habituales. En la práctica, lo que están haciendo es levantar la posición del rodillo a la altura que seleccionamos, lo que nos proporciona esos resultados de grosor que estamos buscando. Algunos de los tamaños más habituales son los que nos permiten trabajar con un grosor de 2 milímetros, de 4 o incluso de 10 en ciertos casos.
Además de esto, también hay que mencionar que los rodillos que están acompañados por aros para ajustar el grosor tienen una serie de medidas indicadas en los mismos, de forma que se proporciona soporte extra a la hora de conseguir los resultados que buscamos.
Aros de distintas medidas disponibles
Siguiendo con lo prácticos que resultan los rodillos de cocina con niveladores, os tenemos que recomendar los distintos sets de aros que tenemos disponibles en MyKaramelli. Si con los aros que se incluyen con el rodillo no tenéis suficiente, perdéis alguno, se os estropea o por cualquier motivo necesitáis más unidades, los packs que os ofrecemos son ideales. En ellos hay más opciones de medidas e incluso nos encontramos con aros que pueden llegar hasta un grosor superior a los 12 milímetros.
Cuando compremos aros adicionales, tenemos que comprobar si son compatibles con nuestro rodillo y también qué condiciones tienen para su limpieza. En principio la mayoría de los aros se pueden lavar en el lavavajillas con total comodidad.
Podremos usar estos aros cuando preparemos una gran variedad de recetas, no solo galletas, también hojaldres o, si queremos hacer algo que no sea dulce, podremos disfrutar preparando bases de pizza o lasañas.
