Pocos dulces como el regaliz han conseguido unir a tantas generaciones. Esta perfecta golosina lleva a que personas de todo tipo de edades se sientan más felices cuando disfrutan comiéndola. Tanto el regaliz como el regaliz de palo, el regaliz rojo o el regaliz negro, han llevado a que estemos más contentos, que nos mantengamos más despiertos mordiéndolos o que incluso podamos dejar de fumar gracias al soporte que nos han proporcionado.
El regaliz tiene una importancia crucial en nuestra sociedad y siempre está ahí cuando lo necesitamos. Por ello en My Karamelli no hemos dudado en ofrecer a nuestros clientes una amplia selección de regalices para que mordisco a mordisco nos llenemos de felicidad.
El regaliz más delicioso
La variedad que existe en la elección del regaliz es lo que hace que personas tan variadas y distintas disfruten de esta golosina de una manera común. Todo comenzó en su consumo de una manera habitual a través del regaliz de palo, que se trata de un alimento natural procedente de un arbusto. Utilizado de forma clásica como ingrediente gastronómico y medicinal, el consumo del regaliz se popularizó a lo largo del tiempo gracias a su comercialización. Por supuesto, el regaliz de palo no es tan dulce como las versiones que se han fabricado a modo de golosina, pero también es un dulce muy consumido por su delicioso e intenso sabor.
Tras el regaliz de palo original llegaron las dos versiones más populares que conocemos del regaliz como golosina: el regaliz rojo y el regaliz negro. Ambos en formato de palo, pero con cuerpo de chuche, han sido una de las preferencias de varias generaciones que los han convertido en una de las mejores formas de disfrutar de un sabor dulce en sus bocas. La larga extensión de estos regalices y lo fáciles que son de morder, los posiciona como una de las mejores maneras de calmar los nervios y de entretenernos mientras estamos disfrutando de una chuchería.
Además, su forma invita a que no tengamos que estar cogiendo chuches de manera constante de la bolsa, sino que podemos comer un regaliz durante varios minutos sin tener que volver a hacer una elección o invertir tiempo en elegir otro tipo golosinas. Son muchos factores positivos los que hacen tan especiales a los regalices.
Regalices de palo rellenos
Otros regalices que se han instaurado con popularidad son los rojos y negros, pero con relleno en su interior. Una capa de golosina habitualmente de color blanco, pero también disponible con otras variantes, lleva a que estos regalices tengan más cuerpo y que fluyan mejor mientras los masticamos. En estos casos disfrutamos de dos sabores. Por un lado del cuerpo de regaliz negro o rojo de la parte exterior, y por otro de la crema de color blanco del interior. Además, hay regalices cuyo exterior se personaliza con otros sabores y colores, como los que tienen sabor a cola.
Estos regalices rellenos son muy fáciles de tragar por la presencia de la nata y para muchas personas resultan más deliciosos, en parte porque tienen más densidad y resultan más complejos que los regalices clásicos.
Otras muchas opciones de regaliz
El mundo del regaliz sigue cambiando y evolucionando y en MyKaramelli podéis encontrar todo tipo de propuestas que os permitirán satisfacer vuestras ganas de comer regaliz de una manera original y sabrosa. Los regalices circulares, cuya superficie se puede ir comiendo mientras deshacemos el círculo que está formado por el regaliz, también son muy populares y comparten bolsa de regalices variados con otras formas famosas, como los regalices en forma de ladrillo. Estos abandonan el estilo de palo, pero mantienen la filosofía de los regalices rellenos, por lo que estaremos disfrutando de dos sabores de manera simultánea en una combinación fantástica.
Nunca hay que olvidar que el regaliz tiene la capacidad de unir a personas de todas las edades, a niños y mayores, así que si estamos organizando una fiesta en la que se combinen invitados de varias generaciones, no podemos olvidar incluir esta golosina entre las propuestas que hagamos. El regaliz siempre es bienvenido y seguro que en más de una ocasión, si lo pensáis, habéis disfrutado con él para mantener la concentración en una actividad o manteneros despiertos cuando estáis estudiando o conduciendo de noche y necesitáis que el sueño no se apodere de vosotros.
