• Batimos las claras a punto de nieve y reservamos.


• Derretimos el chocolate blanco al baño maría o en el microondas y reservamos.


• Batimos la mantequilla a temperatura ambiente hasta que blanquee, incorporamos el azúcar, la vainilla en pasta y seguimos batiendo hasta integrar todo.


• Añadimos las yemas una a una batiendo bien en cada incorporación. Cuando tengamos una mezcla homogénea añadimos el queso y batimos unos minutos más.


• Dividimos la mezcla en dos. A una mitad le añadimos una cucharada de fruta de la pasión en pasta y a la otra le añadimos el chocolate blanco.


• Tamizamos la harina con la levadura y dividimos en dos. Una parte de la harina y la levadura la incorporamos a la masa de la fruta de la pasión y la otra mitad de harina y levadura a la masa del chocolate blanco.

La masa que tiene fruta de la pasión quedará teñida de un naranja suave, pero si quieres darle un color más intenso para que contrasten más los dos colores puedes utilizar colorante en pasta naranja

• Añadimos la mitad de las claras a punto de nieve a la mezcla con fruta de la pasión y la otra mitad a la mezcla con chocolate blanco.


• Forramos un molde rectangular con papel de hornear, lo rociamos con un poquito de spray desmoldante y vertemos las dos masas intercalándolas.

Para verter las masas cómodamente en el molde y hacer decoraciones marmoladas nos será de ayuda poner cada una en una manga pastelera

• Con el horno precalentado a 180 º horneamos durante unos 20 minutos. Este bizcochito de chocolate blanco y fruta de la pasión es húmedo así que no te preocupes si al introducir el palillo este sale ligeramente manchado.

Ya sólo nos queda cortar en cuadraditos y espolvorearlos con un poco de icing sugar

¡Disfrútalos!

Espero que vuestras papilas gustativas queden encantadas con esta receta ;)

Nos vemos en My Karamelli, en Facebook, en Twitter, en Pinterest e Instagram,

Un abrazo,

Mayte